Pablo Neruda, a 42 años de su muerte. Por H. Santarén
A los doce días del criminal golpe fascista del, organizado y orientado por el FBI, la CIA y el Pentágono, en medio de una sangrienta represión y del asesinato de su amigo y compañero de lucha, Salvador Allende, moría el gran poeta Pablo Neruda.
Años después tuve la oportunidad de representar a la Comisión Argentina de Solidaridad con Chile, en el traslado de los restos de Pablo Neruda y de Matilde Urrutia desde el Cementerio General de Santiago a Isla Negra, previo velatorio solemne en el Senado.
En el acto de homenaje Volodia Teitelboin pronunció palabras inolvidables:
"Imaginamos que Neruda será una apropiada carta de presentación ante la gente del Tercer Milenio. Entonces , tal vez, un muchacho pregunte a tiempo, ¿ quién fuè?, ¿ Un poeta, un profeta, un soñador, un mujeriego, un ecologista, un revolucionario? Lo mejor es que conteste Neruda “
“ Soy Chileno, que a lo largo de todo el Siglo he conocido las desventuras y las dificultades de nuestra existencia nacional y que ha participado en cada uno de sus dolores y alegrías. No soy extraño a ello, soy parte del pueblo, soy miembro de una familia de trabajadores que repartieron sus ásperas jornadas entre el centro y el sur del territorio. Jamás estuve con los poderosos y siempre sentí que mi vocación, que mi tarea, era servir al pueblo de Chile, pues mi corazón asì lo decía. He vivido cantándolo y defendiéndolo. Desde mi juventud estuve con los estudiantes rebeldes y con los obreros que comenzaban a organizarse. Han sido míos todos los combates del pueblo Chileno, incluso aquellos que libró antes de mi nacimiento “.
El dia 14 de septiembre de 1973 Pablo Neruda escribió cinco paginas notables sobre los motivos del golpe, sus autores y el notable papel de Salvador Allende:
“Escribo estas rápidas lìneas para mis memorias a solo tres días de los hechos incalificables que llevaron a la muerte a mi gran compañero el presidente Allende. Su asesinato se mantuvo en silencio, fue enterrado secretamente, solo a su viuda le fuè permitido acompañar aquel inmortakl cadáver. La versión de los asesinos es que allaron elo cuerpo inerte con muestras visibles de suicidio. Sin embargo es comprobado que a renglón seguido del bombardeo, en traron y lo ametrallaron, sabían que jamás renunciaría a su cargo”
El 23 de septiembre moria el querido Pablo Neruda, en medio de crímenes, persecusiones, incluso requisas y allanamientos a su hogar.
El 25 de septiembre el féretro de Neruda encabezó la primera manifestación popular contra la dictadura, el primer desafío al pinochetismo. Sus exequias señalaron un nuevo momento, insolito, desafiando al estado de sitio, cercados por las bocas de las ametralladoras, un cortejo audaz, combativo, dispuesto a pagart cualquier precio por acompañar a su poeta y repudiar la dictadura.
¡Pablo Neruda, Salvador Allende, Victor Jara y miles mas presentes, ahora y siempre!
Buenos Aires, 23 de septiembre 2015
Hector Santarén
Libres del Sur