Entrevista a Carlos Morello

Carlos Fernando Morello tiene 36 años y una figura delgada. Con “Rocinante” al lado podría decirse que es un Quijote de tiempos modernos. De hecho, un día agarró la lanza y cargó contra los molinos de viento, cuando denunció el caso La Ciénaga, el escándalo más fuerte de los últimos años, y que involucra a un peso pesado: Juan Carlos Romero. “Fue un hecho muy importante. En Salta no había habido un escándalo por un negocio raro y, quizás, fuera de la ley de estas características. Cuando yo encuentro ese hecho irregular empiezo a investigando. Fueron tres semanas estudiándolo a fondo, hago la denuncia y bueno, fue en lo personal un hecho estresante por decirlo de alguna forma, fue fuerte. Porque una cosa es denunciar al poder en un micrófono, en un discurso o en la Cámara de Diputados a través de un discurso, y otra cosa es firmar una denuncia, presentarse a la Justicia y venir a la Cámara de Diputados y pedir una comisión investigadora. Esto impacto mucho en la gente, porque creo que no hay recuerdo en los últimos años de alguien que se haya enfrentado de tal forma a un hombre tan poderoso como Romero en la provincia”, le dice a Informatesalta sentado en la mesa al lado de un gran ventanal en algún café del casco céntrico. La gente pasa y lo mira de reojo, se codean y murmuran por lo bajo. ¿Qué se sabrán decir de este hombre casado y separado, padre de un hijo? Vaya uno a saber, lo cierto es que Morello cobró tanta preponderancia en los medios, que hoy es uno de los famosos que camina en calma por las calles salteñas.

- ¿Sufrió amenazas desde que efectuó la denuncia?

- No, desde lo personal no. Por ahí no quise caer en eso de estar alerta de todo y que todo parezca como que todo está en contra mío, ni ver fantasmas en todos lados. Después bueno, en el ámbito político obviamente que hubo reacciones del entorno de Romero, lógicamente defendiéndolo, intentando ser en algunos casos ofensivos hacia mi persona, pero a mi no me ofendieron en lo absoluto. Hubo una editorial en el diario El Tribuno que dice que yo era una persona sin historia para llevar adelante una denuncia de esa magnitud, pero yo pregunto: ¿se debe tener historia para denunciar a alguien cuando se piensa que, presuntamente, se hicieron mal las cosas? Una de las obligaciones que me dio la tarea al elegirme como diputado es justamente controlar al Ejecutivo. Y cumplí con ese cometido que me dio la gente.

- Usted tiene cara de buen tipo, ¿piensa que este detalle potenciará sus chances en las elecciones? Porque se sabe que la cara lo ayuda mucho a un candidato…

- Se ha tratado de frivolizar la política desde hace mucho tiempo, y en este sentido se trata de vender imágenes despegadas del proyecto político que uno tiene. En mi caso no se si me beneficiará o no. Prefiero que la gente me conozca por mi trabajo, por mi trayectoria y por mis proyectos.

- Habla de la frivolizar la política, y Miguel del Sel acaba de aceptar ser candidato a gobernador de Santa Fe por el PRO.

- Ahí tiene un ejemplo, esta frivolización de la política comenzó con Menem, cuando trajo a los Rolling Stones, a Madonna, jugó al básquet. Se trató de vaciar de contenido a la política, y desgraciadamente se la vació de contenido a la política.

- Se buscan caras conocidas, fundamentalmente de la TV. ¿Usted cree que los medios influyen sobre la decisión del electorado?

- La TV y los medios de comunicación influyen, pero hasta cierto punto. No pueden cambiar el ánimo social de raíz. Hay grandes estructuras políticas que contaban con grandes medios de comunicación que fueron derrotadas en las elecciones porque el humor social decía basta, no queremos más de esto. Tenemos ejemplos acá en la provincia cuando Urtubey le gana a Romero, o cuando Ulloa le ganó a Roberto Romero. Después a nivel nacional tenemos el ejemplo cuando De Narváez le gana las elecciones a Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires, y eso que Kirchner tenía todo el aparato detrás, sin embargo la gente dijo basta.

- ¿Y cómo ve el escenario político salteño para el 10 de abril?

- Hay un escenario político que creo que es favorable para las fuerzas nuevas, para las fuerzas que no han sido hegemónicas durante la historia en Salta. Creo que esto tiene que ver con el desgaste de las viejas estructuras. Todos sabemos la crisis que viene sufriendo la Unión Cívica Radical desde hace mucho tiempo en nuestra provincia; una crisis profunda que está sufriendo el Partido Renovador en estos momentos.

- Del Pla dijo que el PRS y la UCR están en vías de extinsión…

- Yo creo que van en ese camino. Después el mismo Partido Justicialista está en una crisis tremenda, tenemos tres candidatos a gobernador: Urtubey, Olmedo y Wayar, los tres surgen del PJ. Yo creo que esas crisis que están sufriendo, esas divisiones, tienen que ver con que esos partidos ya no representan en la sociedad lo que supieron representar en otros momentos.

- De los tres candidatos del Justicialismo, ¿con cuál se queda?

- Con ninguno de los tres. Urtubey no cumplió con el cambio que había prometido para la provincia. Wayar fue parte de la destrucción de esta provincia. Cuando él dejó la vice gobernación esta provincia quedó con el 60% de la población debajo de la línea de la pobreza y Olmedo forma parte de eso, formó parte de los negocios con el poder a través de Salta Forestal, forma parte del poder económico en Salta que ha crecido mucho de la mano del poder político. Yo a Olmedo lo veo encuadrado en el mismo sector conservador que Romero, Urtubey o Wayar.

- Mucha gente se pregunta por que un empresario gasta tanto dinero en una elección, y la duda surge porque nadie sabe el método que usan después para recuperarla…

- Yo creo que ellos no llegan a la política por convicción o por ganas de transformar a la sociedad, sino que llegan a través de una especulación económica. Y esta especulación económica tiene que ver también con la campaña, si yo consigo plata del amigo, del empresario, si invierto tanto, después soy gobernador y lo recupero. Y ahí tenemos como han ido apareciendo distintos negocios con algunos amigos que da la pauta que esto es así. Después llegan al gobierno con la intención de recuperar toda la plata y más, obviamente, de lo que han invertido para llegar al gobierno.

- La Ciénaga y Salta Forestal, ¿tienen alguna similitud estos casos?

- La única diferencia que creo que hay es que Salta Forestal estaba avalada legalmente por el Ejecutivo; en el caso de La Ciénaga no hubo ningún instrumento de la Legislatura que avale eso.

- Si en el caso La Ciénaga se comprueba que hubo dolo, ¿cuál sería la pena?

- Debería ser hasta 10 años de prisión, porque está caratulada como “peculado”, esto es cuando un funcionario público se queda con algo que es del Estado.

- Sinceramente, ¿se lo imagina al actor principal de esta historia con traje a rayas, en caso de ser encontrado culpable?

- La verdad es que estamos acostumbrado a que, en este país, el que tiene mucho poder no va nunca preso. Pero debo decir por ejemplo que nadie pensaba que Menem en algún momento de su vida iba a estar detenido. Yo creo que tiene mucho que ver la influencia de la sociedad, si la sociedad permite la impunidad habrá impunidad, si no la permite, la impunidad se acabará.

- Por qué la gente tiene que votar a Morello?

- Yo creo que la gente tiene que votar por mi porque tengo un proyecto político de cambio en serio. Creo que hay que atender las urgencias sociales, y cuando hablo de urgencias sociales hablo del hambre, de la inseguridad, de desocupación, de la falta de viviendas. Pero además de eso, porque proyectos en épocas de campaña todos los candidatos lo presentan y son todos lindos, pero además hay que fijarse en la trayectoria. En esta provincia, para poder cambiarla para hacer que los salteños vivan dignamente, hay que enfrentar a los sectores concentrados del poder, y en los últimos años el único que ha puesto su firma para enfrentar a los sectores de poder en una denuncia penal he sido yo.

- ¿Piensa que usted será el próximo gobernador de Salta?

- Yo creo que la sociedad salteña está esperando el cambio que Urtubey prometió en el 2007 y que no cumplió, y creo que eso abrirá oportunidades para que hagamos una muy buena elección.

- Por último, ¿cuál sería su mensaje para los salteños?

- Yo le pido a los salteños que usemos este tiempo que quedan para las elecciones para reflexionar, que hagamos un análisis profundo de las propuestas, de los candidatos sobre todo, de la trayectoria que tienen, porque después son cuatro años, si uno vota y se equivoca, son cuatro años que tenemos que cargar con esa equivocación, y si uno a eso lo vive en la vida de una persona, si se equivoca tres veces son 12 años. Y en este país tenemos mucha experiencia de que nos hemos equivocado muchas veces y hemos hipotecado el futuro de muchísimas generaciones.