Las penas son nuestras, los éxitos de Cristina

COMUNICADO DEL FRENTE AMPLIO PROGRESISTA (FAP) SALTA

LAS PENAS SON DE NOSOTROS, LOS ÉXITOS SON DE CRISTINA
 

Cristina Fernández de Kirchner hizo esta vez un muy largo discurso para dejar inauguradas las sesiones parlamentarias del 2012. En él, como es habitual en la Presidenta, hizo un largo raconto de todos los logros de su gestión para decirnos a los argentinos y argentinas del maravilloso país que han construido en los últimos nueve años.

Pero en realidad, nada dijo sobre modificaciones profundas del modelo hidrocarburífero heredado desde el menemismo. Tampoco anuncio los cambios exigidos por miles y miles de argentinos en el modelo minero en vigencia, también heredado de la década del 90. Ni una palabra de autocrítica sobre las responsabilidades del Estado en la deplorable situación del sistema ferroviario, mucho menos un planteo serio sobre modificaciones al esquema de concesiones ideado e iniciado en la época neoliberal.

Ni un solo anuncio de modificaciones en el régimen de entidades financieras, muy lejos de ello se manifestó a favor de mantener el sistema legal en vigencia que fue sancionado durante la última dictadura militar, allá por los 70. Nada, ni una sola palabra sobre alguna modificación al sistema tributario nacional, absolutamente regresivo donde aportan mas quienes menos tienen mientras quienes deberían ser los grandes contribuyentes como las multinacionales mineras son beneficiadas con normas tributarias por demás flexibles, recordemos, sistema tributario perfeccionado por el ex ministro Cavallo. 

Ni una sola mención, ni siquiera al pasar, sobre modificaciones al régimen agropecuario que lejos de ser progresista promueve y facilita el monocultivo y el latifundio a costa de la expulsión de sus tierras de cientos de familias. Sobre derechos humanos, nada, solo alguna mención al Juez español Baltasar Garzón y a los juicios contra los genocidas del proceso, muy bien por ello, pero nada, ni una palabra sobre detener la creciente criminalización de la protesta social y las represiones a las protestas sociales que vimos los últimos meses, o de hacer una autocrítica por la sanción y promulgación de la ley Antiterrorista, nada por allí.

Ni la más minima autocrítica sobre el festival de subsidios que hasta hace unos meses beneficiaba hasta a los casinos, lejos de ello una defensa cerrada sobre el mismo. Nada, como hasta ahora sobre la inflación y como enfrentarla, nada.

Ni un segundo de su discurso dedico la presidenta a asumir y a comprometerse a solucionar la difícil situación en la que viven más de 4 millones de jubilados que cobran la mínima y están muy por debajo de la línea de pobreza.
 
En fin, en los asuntos centrales, aquellos que marcan el rumbo progresista o no de un gobierno no hubo anuncios que hagan pensar que la "profundización del modelo" signifique alejarse del modelo "noventista" e ir a un modelo de mayor justicia, soberanía e inclusión social. No solo eso, sino que al silencio en algunos temas le seguía una encendida defensa de algunas aristas del modelo kirchenrista para nada progresistas, defendió el régimen de entidades financieras, la megaminería a cielo abierto y el sistema de transporte subsidiado en manos de empresarios privados como el "amigo" Cirigliano.
 
En otros párrafos de su discurso Cristina apelo a la táctica de culpar a distintos sectores de la sociedad sobre los problemas del país, como cuando critico la lucha que llevan adelante los docentes por salarios dignos diciendo que "con jornadas laborales de 4 horas y 3 meses de vacaciones como es posible que solo tengamos que hablar de salarios" nada que envidiarle a López Murphy, o cuando culpo del accidente del tren de once a quienes se opusieron a la construcción del tren bala.
 
Una parte importante de su discurso lo dedico a su enfrentamiento con Mauricio Macri, jefe de gobierno de la Ciudad de Bs. As., una puesta en escena, debatir con quien no puede ni siquiera garantizar la seguridad en los subtes es una puesta en escena que encubre la necesidad de inventar un "enemigo" por derecha y de evitar pelearse con los grandes problemas que aquejan al país: inflación, pobreza, inseguridad, falta de vivienda, crisis energética, falta de combustibles, etc., etc.
 
En fin, cada vez queda mas claro, que cuando se habla de "profundizar el modelo" debe entenderse que se habla de mantener las estructuras económicas, sociales y políticas que nos dejaron los 90, nada le impide a la Presidenta de la nación salir de ese esquema y solucionar los problemas de millones de argentinos, un 54% de la ciudadanía la ha votado, mas de 3 millones 700 mil argentinos y argentinas han votado al Frente Amplio Progresista (FAP) como segunda fuerza política del país, y la derecha política ha quedado reducida a casi la nada en las ultimas elecciones. Sabe la presidenta que los 22 diputados nacionales y los 5 senadores nacionales del Frente Amplio Progresista están dispuestos a acompañar cualquier proyecto que vaya en el sentido de construir una argentina mas justa, digna e inclusiva; como ya lo hemos hecho en la Ley de Medios, Aerolíneas, las AFJP, etc., etc.
 
Pero sabemos, que para salir del esquema noventista y solucionar los problemas de los argentinos hace falta voluntad, responsabilidad política y dialogo con todos los sectores políticos y sociales, voluntad y responsabilidad cada vez mas ausentes en el gobierno nacional.
 
Salta, 02 de marzo de 2012.-
 
Frente Amplio Progresista (FAP) Salta
Carlos Morello – Daniel Escotorin – Antonio Soria