Por un “Indice Estudiantil de Precios”
Crisis en la UBA
Ante el ajuste del Rector Barbieri y las denuncias de corrupción. Hoy nos movilizamos al Consejo Superior de la UBA para reclamar el “Indice Estudiantil de Precios”
Mientras que el Rectorado de la UBA en manos del Rector Barbieri y Nuevo Espacio, que gobiernan de la mano de los K y el PRO, siga siendo cómplice de las políticas de ajuste del gobierno nacional a la educación, que desconocen el fuerte impacto inflacionario y la total deficiencia del presupuesto para cubrir siquiera los gastos más fundamentales cómo los sueldos docentes, es difícil pensar que la Universidad más importante de Argentina y una de las más importantes de Latinoamérica pueda revertir el alto índice de deserción que posee.
En el marco de la crisis en la UBA y las denuncias en relación al desmanejo presupuestario, nos movilizamos por nuestros derechos estudiantiles y presentaremos una iniciativa para que se hagan públicos los datos oficiales sobre el costo de estudio y los niveles de deserción. Además en el marco de una nueva sesión del Consejo Superior, el Movimiento Universitario Sur y estudiantes independientes daremos a conocer los resultados del índice estudiantil realizado ante las máximas autoridades de la UBA.
Buscamos el reconocimiento del “INDICE ESTUDIANTIL DE PRECIOS”, una iniciativa que busca determinar cuál es el costo de estudiar en las facultades de la UBA, además de reclamar la publicación de las estadísticas oficiales.
Esta iniciativa nace ante la ausencia de estadísticas serias y oficiales que, -al igual de los que sucede a nivel nacional con el Indec K y la pobreza- den cuenta del gasto que genera el llevar adelante los estudios de grado. Si bien la UBA es una universidad pública y por lo tanto no está arancelada, el desconocimiento de la información con respecto a los gastos básicos deja un enorme vacío y una ceguera absoluta sobre un elemento condicionante a la hora de pensar el ingreso, la permanencia y el egreso de los estudiantes. Al punto tal que no es descabellado inferir, que una de las causas de la deserción y la baja matrícula de estudiantes que llega a recibe, este vinculada a causas económicas. El IEP es una herramienta válida, que entendemos que el Rectorado de la UBA debe incorporar como política clave en pos de redireccionar las prioridades presupuestarias y rediseñar los instrumentos (por ejemplo becas) que posee para garantizar los derechos básicos de los estudiantes.
Lamentablemente hoy nos encontramos, año electoral por medio, con la ejecución poco transparente de enormes presupuestos destinados a infraestructura, que si bien son una gran deuda pendiente, hoy están revelando un oportunismo político que no apunta a la resolución de las necesidades más urgentes de la universidad, estando teñidas de falta de información pública al respecto y denuncias de corrupción al respecto.
Esta iniciativa se desarrolla en el marco de la Campaña Nacional “Ponele un 10 a la Educación” mediante la cual se solicita un presupuesto para la educación pública equivalente al 10% del PBI justamente para que sea posible adoptar medidas que en el marco de la crisis económica y ajuste eviten la deserción en el sistema educativo. Según un estudio realizado el 2013, en la gestión pública solo 23 de cada 100 estudiantes se gradúan, y la Argentina tiene una de las menores tasas de graduación en relación con la cantidad de ingresantes no sólo en la región, sino también en el mundo.
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