Macri gobierna para los ricos
Despidos, pocas dudas de que
Macri gobierna para los ricos
Tuvo ayer media sanción en senadores un proyecto de ley para frenar los despidos por 180 días. El gobierno viene ya hace días, con el apoyo de las grandes patronales -AEA, ABA, Sociedad Rural, ACDE, Cámara de comercio de EEUU en Argentina, etc-, intentando impedirlo sostenidamente.
Uno de los argumentos usados es que no hay por estos días crecimiento de la desocupación, mostrando cifras tan truchas como el INDEC de Cristina. Hay despidos en el Estado en todos los niveles, freno de la Obra Pública y de la construcción de general, otro tanto sucede en la industria automotriz y baja el consumo hasta de alimentos; pero para el gobierno no hay despidos por ello sino que crece la ocupación. Las cosas que ha que escuchar, igualito a cuando el kirchnerismo nos decía que casi no había pobres en la Argentina y se había terminado con la indigencia.
Otro justificativo para que Macri se oponga a la ley, amenazando incluso vetarla, es que en su opinión es “una arbitrariedad que agravó el problema cuando se aplicó allá por el 2002”. Que sea lícito despedir gente y arbitrario impedirlo en medio de una severa crisis económica, habla bastante a las claras del concepto de sociedad que tiene el presidente y de su sensibilidad social ante los que sufren. Que la ley del 2002 hay sido contraproducente, es una muy particular interpretación suya, ya que cuando se puso en práctica teníamos una desocupación del 23% y cuando terminó su vigencia estábamos en el 8%. Es decir, muy lejos aquella experiencia de impedir la generación de nuevos empleos, caballito de batalla del gobierno para oponerse a frenar los despidos.
Lo que se oculta atrás de esta férrea oposición del macrismo a la ley anti despidos, en momento en que se lleva adelante una durísima política económica de ajuste, con visible traslado de ingresos de los que menos tienen a los sectores mas concentrados, es que el gobierno necesita de un fuerte contingente de desempleados que presionen a la baja los salarios discutidos en las paritarias que cerrarán los próximos dos meses. Pero no se queda allí la estrategia gubernamental, sino que apunta a tener en forma permanente elevada desocupación que contribuya a mantener baja en el tiempo la mano de obra nacional.
Eso es lo que les están ofreciendo a los grandes inversores externos. “Vengan a la Argentina que tendrán bajos costos laborales” es el mensaje que les hace llegar a aquellos el gobierno de Cambiemos. A los grandes empresarios locales, esos que han cerrado filas contra la ley de despidos, les ofrece también abaratarles la mano de obra; como Menem en su momento con la flexibilización laboral y De la Rúa en la recordada ley Banelco. Es decir, bajarles los costos por la vía de disminuir los salarios de los trabajadores.
Se escuda el gobierno de Macri en que, al oponerse a la ley que frena los despidos, defiende a los nuevos trabajadores por contratarse; lo que es falso, puesto que no habrá generación de puestos de trabajo en un contexto de recesión con inflación como el actual. Como así también que defiende a las Pymes, que son las mayores empleadoras; ocultando que estas pequeñas y medianas empresas viven del mercado interno, cuanta mas desocupación haya producto del ajuste, mas verán afectadas sus ventas.
En definidas cuentas, es en estas cosas, mas allá del palabrerío que utilicen para explicar lo inexplicable, en donde se pone negro sobre blanco que Macri gobierna para los ricos, para los que mas tienen, para los sectores poderosos económicamente de aquí y de afuera. Afectando crecientemente para ello a las mayorías de clase media, laboriosas y a los pobres.
Humberto Tumini
Movimiento Libres del Sur