Velasco sobre Educación Sexual

Velasco sobre Educación Sexual

En el marco del día internacional por la Salud de las Mujeres (que fue el pasado martes 28 de mayo), la candidata a Legisladora por la Ciudad de Buenos Aires y representante de Mumalá en el Parlamento de Mujeres de la Ciudad, Laura González Velasco, participó esta tarde de la sesión especial que, frente al Congreso de la Nación, debatió sobre la importancia de votar la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.

En el marco de la actividad que se desarrolló bajo la consigna de la Campaña por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito "Educación Sexual para Decidir, Anticonceptivos para No Abortar, y Aborto Legal para No Morir", González Velasco realizó su intervención en torno a la aplicación de las Leyes de Educación Sexual Integral de la Nación y la Ciudad de Buenos Aires en todos los niveles educativos: “El curriculum oculto escolar sigue funcionando en la transmisión de prejuicios y mitos sexistas que paralelamente se refuerza muy eficazmente en los medios de comunicación masiva o en las redes sociales.Se naturaliza un rol asignado históricamente a la mujer, pasivo, doméstico,subordinado al deseo y al poder masculino”.

Sobre esta problemática en la Ciudad de Buenos Aires, Velasco afirmó: “La gestión macrista en la Ciudad de Buenos Aires incumple con la aplicación de la Ley de Educación Sexual 2110 y de los propios preceptos de la Constitución local referidos a la promoción de la igualdad de género, ejecutando el 0,1 del presupuesto destinado a educación sexual y capacitando sólo a 2000 de las/os más de 55.000 docentes que se desempeñan en la Ciudad”.

 
Prensa Laura González Velasco
Candidata a Legisladora en CABA del Movimiento Libres del Sur en el Frente Amplio Progresista
Representante de Mumalá en el Parlamento de Mujeres de la Ciudad de Buenos Aires

 

Copiamos bajo nota de la candidata sobre aplicación de las Leyes de Educación Sexual Integral de la Nación y la Ciudad de Buenos Aires en todos los niveles educativos. 

Educación Sexual Integral, por derechos e igualdad de género

 

Libros de lectura con dibujos de mamás cocinando y papás mirando el diario, rincones con cunas y bebotes para chicas ode bloques y autitos para varones, rosa o celeste, juegos tranquilos o fútbolen el patio, arte o ciencia, aplicación o genialidad, sensibilidad o razón.Estereotipos socio-culturales de los géneros en los que nos hemos idoformando  en nuestras familias, en la escuela, en la sociedad capitalista y patriarcal de la que las mujeres somos parte llevando la desventaja.

 

La lucha de las feministas y movimientos demujeres han tenido enorme impacto en el último siglo en la conquista dederechos igualitarios, particularmente desde los años 60 junto con reivindicaciones de otros “sectores subalternos” discriminados por su origen étnico,socio-económico, cultural, religioso o de diversidad sexual. Las transformaciones económicas, sociales y culturales sostienen una relación dialéctica con los cambios en la institución escuela, sin duda muchas cosas se han ido modificando en estos años pero no tantas como parece.

 

El curriculum oculto escolar sigue funcionando en la transmisión de prejuicios y mitos sexistas que paralelamente se refuerzamuy eficazmente en los medios de comunicación masiva o en las redes sociales.Se naturaliza un rol asignado históricamente a la mujer, pasivo, doméstico,subordinado al deseo y al poder masculino. Esto funciona con las princesas que esperan a su príncipe salvador en los cuentos tradicionales tanto como en las telenovelas. En las modelos de las publicidades tanto como en la imagen que posan las adolescentes en facebook. ¿Qué representaciones construímos las mujeres de nosotras mismas? ¿Qué actitudes, parámetros de belleza, conductas cotidianas necesitamos reproducir para ser valoradas o aceptadas? ¿Qué sucede  cuando no nos parecemos a nuestras Barbies altas, delgadas, rubias y con mucha ropa de moda? ¿Cómo fortalecemos nuestra autoestima y autonomía para garantizar el cuidado de nuestro cuerpo y deseo para poder decir que no en nuestras relaciones de pareja? ¿Cómo desnaturalizamos los valores hegemónicos para cuestionarlos en nuestra acción cotidiana con identidades y relaciones más libres e igualitarias?

 

La educación es clave como reproductora o contra-hegemónica respecto del statu quo, puede tener una concepción “bancaria”depositando en nuestras cabezas vacías los saberes y mandatos para que nos adaptemos a un orden social donde la riqueza, la palabra y el poder tienen dueños o puede ser crítica promoviendo transformar el mundo con un sentido de justica en la opción por los intereses de los oprimidos y las oprimidas. Esta educación que deseamos construir para dar batalla ideológica, para edificar otra cosmovisión, para que nos pensemos como protagonistas en la transformación de la realidad como lo fueron y lo son muchas mujeres en nuestra historia, es una educación pública y popular no sexista.

 

Garantizar los derechos de las mujeres es una cuestión de derechos humanos que debe ser asumida como política pública específica y transversal , con planificación, prioridad y presupuesto. En la construcción de ciudadanía abordar una perspectiva no sexista es estratégico para transformar las relaciones de poder.  El Estado debe implementar las leyes de educación sexual integral convocando a distintos actores sociales como las organizaciones de mujeres que aporten al desafío que tiene hoy la escuela pública para socializar conocimiento para el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, pero también para re-codificar los sentidos y representaciones sociales sobrenuestra identidad como hombres o mujeres.

 

Logramos en el año 2006 la Ley Nacional 26.150 de Educación Sexual Integral, legislación que en conjunto con la Ley Nacional 26.485 de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres son logros históricos de las organizaciones de mujeres y de los movimientos populares y progresistas. Sin embargo, aunque la ley tenía cuatro años de plazo para implementarse en todas las provincias argentinas,  siete años después, sólo cinco provincias (La Pampa, Santiago del Estero, Misiones, Santa Cruz, Mendoza) adhirieron a la ley y otras dos (Entre Ríos y Ciudad Autónoma de Buenos Aires) tienen una ley propia. 

 

El otro problema es presupuestario, al igual que con la Ley para erradicar la Violencia hacia las Mujeres, no se destina presupuestoque exprese la  decisión política real de transformar con políticas públicas concretas la situación asimétrica que padecemos las mujeres en la Argentina. Gobiernos provinciales como el de Salta, con altísimos índices de femicidio, resisten la aplicación de la ley de educación sexual en las escuelas, al tiempo que también la gestión macrista en la Ciudad de Buenos Aires incumple con la aplicación de la Ley de Educación Sexual 2110 y de los propios preceptos de la Constitución local referidos a la promoción de la igualdad de género, ejecutando el 0,1 del presupuesto destinado a educación sexual y capacitando sólo a 2000 de las/os más de 55.000 docentes que se desempeñan en la Ciudad.

 

Los embarazos adolescentes no deseados y las maternidades prematuras; las situaciones de abuso sexual; las 500.000 mujeres en riesgo por abortos clandestinos, las 70.000 mujeres que llegan a las guardias hospitalarias con complicaciones post-aborto, más de cien muertes de mujeres jóvenes y pobres anuales por aborto clandestino; las consecuencias sobre la salud femenina de la bulimia y la anorexia; las mujeres y niñas desaparecidas en democracia víctimas de las redes de trata vinculadas a la explotación sexual que siguen mercantilizando nuestros cuerpos con la complicidad corrupta de agentes del estado;la violencia simbólica reforzando estereotipos que objetivizan e inferiorizan a las mujeres en los medios de comunicación;la discriminación laboral a las mujeres con menor salario por igual tarea y la no valorización de la tarea doméstica y del cuidado de hijas e hijos que no se comparte; la violencia machista, el dificultoso acceso a la justicia, a refugios, a educación inicial para hijas e hijos y a un salario digno que garantice la autonomía económica de las mujeres víctimas de violencia; el femicidio que se lleva cada 30 horas la vida de una de nosotras, deben imponer una agenda al poder político para trabajar de verdad por los derechos humanos de las mujeres. 

 

Laura González Velasco-Educadora-Candidata a Legisladora de Libres del Sur-FAP CABA-Integrante de Mumalá (Mujeres de la Matria Latinoamericana)