[Bs. As.] Encuesta sobre la alimentación en Comedores Escolares

Encuesta sobre la alimentación en los Comedores Escolares de la Provincia de Buenos Aires

El mismo consistió en entrevistas presenciales que se realizaron a docentes y padres de 120 establecimientos escolares de enseñanza primaria, a los que se les preguntó sobre las comidas que se les sirven diariamente a los alumnos que comen en el comedor de la escuela en la que enseñan o a la que sus hijos asisten.

Se entrevistaron tres docentes, y dos padres o madres de cada escuela, buscando entre estos últimos preferentemente que sean miembros de las cooperadoras escolares y por lo tanto estén al tanto del funcionamiento del comedor. Se hicieron en total 600 entrevistas en los distritos de La Matanza, Moreno, Merlo, San Miguel, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Esteban Echeverría, San Martin, Malvinas Argentinas, Avellaneda, Lanús, José C. Paz, Hurlingham y Morón.

Las preguntas que se hicieron fueron:

1. ¿Cuáles son las diez comidas más habituales que se proveen en el comedor de la escuela?

2. ¿Hubo incremento, descenso o se mantiene la misma cantidad de alumnos que comen en el comedor?

3. ¿La provisión de elementos para el comedor por parte del consejo Escolar, alcanza para cumplir con las comidas con los valores nutricionales fijados por el gobierno provincial?

4. ¿Se modificó durante el presente año la carencia de frutas, verduras y leche que se arrastraba de ejercicios anteriores?

1. Comidas habituales

Los menús se van acomodando, semana a semana de acuerdo a la provisión de productos por parte del Consejo Escolar. Por lo tanto las frecuencias son estimaciones aproximadas según expresaron las personas entrevistadas. Aquí figuran las que fueron indicadas con las repeticiones semanales o quincenales indicadas, como mínimo por el 90% de los entrevistados.

Otras comidas fueron mencionadas por debajo del 10% de los casos: bife a la criolla con papas y arvejas (9%); pastel de papas (9%); milanesa de cerdo con papas (5%).  En todos los casos se menciona el acompañamiento de por lo menos una rodaja de pan. El postre acompañando estos almuerzos es mencionado por el 90% de los entrevistados. Mandarina o naranja es el más frecuente (80%), u otras frutas como manzana (10%) o banana (7%).

2. Concurrencia al comedor de la escuela

Durante la actual administración los Consejos Escolares procedieron a ajustar las becas por escuela, buscando evitar el envío de mercaderías por encima de la demanda real de porciones de las escuelas. El pedido de las escuelas por encima de las porciones requeridas en sus comedores, era un recurso utilizado para paliar la escasez de los productos que le llegaban, aumentando la cantidad de comida para cada niño/a. Esta posibilidad ahora fue descartada a través de mayores controles. Independientemente de esa situación los porcentajes de incremento que aquí figuran se refieren a la cantidad real de alumnos/as que almuerzan durante este año en comparación al 2015.

3. Los productos provistos alcanzan para el menú fijado por el Consejo Escolar

Un 65% de los entrevistados afirmó en forma contundente que los productos que se proveen desde los Consejos Escolares de los municipios no alcanzan para cumplir con el menú fijado por los propios Consejos. Estos a su vez argumentan que los $12.60 que paga el gobierno provincial no cubre los costos mínimos de las mercaderías, situación que se agudiza días a día a medida que los precios aumentan. Pero que se ven obligados a establecer esos menús, que saben que no van a poder solventar, porque hay una resolución provincial que establece los ingredientes con los valores nutricionales  indispensables que deberían contener las comidas en los comedores escolares de toda la Provincia.

O sea, desde la más alta autoridad provincial se van encadenando una serie de resoluciones inconsistentes, que terminan en un plato que consumen los niños/as escolarizados,  de los que están ausentes los nutrientes básicos.

4. Leche, frutas y verduras en los alimentación diaria de los comedores

En los años anteriores –en especial en los dos últimos- la leche había desaparecido por completo de las meriendas y desayunos. Según los testimonios del 85% de los entrevistados esta situación se modificó, incorporando la leche y algún alfajor a estas comidas (antes: mate cocido con pan en la mayoría de los casos).

Las frutas parecen llegar con mayor intermitencia –casi siempre mandarinas dicen los testimonios afirmativos- un 65% de los entrevistados se reparten entre los que dicen que no llegan, y los que afirman que sólo a veces. Mientras que las verduras parecen continuar siendo una las grandes carencias de los comedores escolares: un 75% dice que no están presentes.

En base a estudio nutricional y de costos de los alimentos  a precios mayoristas al mes de mayo, cinco comidas semanales deberían tener como mínimo la siguiente composición:

Actualmente se alimentan en los comedores escolares de la Provincia de Buenos Aires un millón y medio de niños y niñas, de los cuales aproximadamente un 70% son de los distritos del conurbano.

Si el gobierno provincial elevara el monto destinado a este fin hasta cubrir estos costos, y suponiendo que debería solventar 180 días de clase –que es el objetivo propuesto- tendría un incremento de aproximadamente 1% anual del total del presupuesto provincial. Es claro que no implica un valor que podría alterar el equilibrio presupuestario, pero que por otro lado generaría una importante contribución a la reducción de los índices de malnutrición entre los sectores más vulnerables de la población.

Un último dato llamativo es que por estos mismos días, el gobierno de la CABA -del que la actual gobernadora fue Vicejefa de Gobierno hasta hace pocos meses- paga $40 por la comida diaria por alumno.

Si bien allí los proveedores son privados, desagregadas las ganancias de éstos  que incluyen los costos de mano de obra, los montos destinados a los alimentos están en el orden de los $25/27, que comparados con los $12,60 de Provincia de Bs As, es obvio que hay una diferencia sustancial injustificable de presupuestos destinados a la alimentación de los niños y niñas escolarizados, que viven a uno y otro lado de la Avenida General Paz.

Isaac Rudnik
Director ISEPCi | Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana