Silvia Saravia: "Macri y Stanley son las dos caras de una misma moneda"

Por Silvia Saravia / Nacional octubre 11, 2019 14:04

Silvia Saravia: "Macri y Stanley son las dos caras de una misma moneda"

La líder de Barrios de Pie no descarta que su organización participe en un eventual gobierno de Alberto Fernández. Cuestiona a su antecesor en el rol de coordinador, Daniel Menendez: «La ruptura que hicieron, la hicieron en base a una mentira», asevera.

Silvia Saravia es una de las protagonistas en las batallas que se dan en medio de la emergencia alimentaria y social en Argentina. En su rol de coordinadora nacional de Barrios de Pie, asegura que la inflación se siente más fuerte en las barriadas. En el plano electoral apoyan la candidatura de Roberto Lavagna y define como una jugada «audaz» de Cristina haber impulsado la candidatura presidencial de Alberto Fernández.

 

-Después de las PASO en la que el gobierno nacional cayó derrotado por el Frente de Todos y hubo una fuerte devaluación de la moneda ¿Cómo es la situación en los barrios?

-Después de las PASO dejaron de entregarnos alimentos. Ya no era solo la leche, sino todos los alimentos. A eso lo acompañó la devaluación que hubo, y el incremento de los alimentos. Tenemos un indicador barrial de precios y nos da que cuando la inflación que mide el INDEC da un 4%, en el barrios los alimentos aumentaron el 10%. Todo ese panorama de agravamiento muy veloz se suma a que el ministerio tomó la decisión de no asistir. Fue una convulsión muy fuerte que nos llevó a tener que acampar una semana 24 horas y a la otra 48 horas.

-¿Hay instancias de dialogo con el gobierno?

-Hay instancias de dialogo. De hecho antes del acampe de 48 horas tuvimos una reunión con uno de los funcionarios, no solo nosotros, todas las organizaciones fueron teniendo reuniones. La ministra no fue a ninguna-por Carolina Stanley-, había estado el día anterior con la CGT pero con las organizaciones no se sentó. A la noche fue a un programa de televisión y planteó que el acampe era una extorsión. No solo eso, sino que aparte nos mencionó al dirigente del Polo Obrero y a mi, con nombre y apellido.

-¿Qué recepción hay en la calle de automovilistas y peatones cuando realizan las manifestaciones?

-Algunos funcionarios tienen un grado muy alto de agresividad que nosotros no notamos en la calle. En la calle la situación es diferente. Hay épocas en que la sociedad esta más agresiva, pero en este momento no. Es un momento que hay mucha solidaridad, o en algún caso si no hay solidaridad se la bancan. No te agreden. Hay una compresión de lo que está pasando. Pero si veo muy agresivo a los dirigentes. Hay funcionarios con responsabilidades de lo que hoy esta pasando que tienen que hacerse cargo pero invierten la culpa. El problema somos nosotros que nos movilizamos y no se plantea que el problema es que los pibes y pibas no comen.

 

-¿Qué opina de la afirmación del candidato del Frente de Todos de que las organizaciones sociales «eviten estar en las calles»?

– Alberto Fernández que me disculpe, pero la emergencia alimentaria no se hubiese votado si las organizaciones sociales no hubiésemos salido a la calle. Mas allá de las diferencias, todas las organizaciones sociales estamos planteando, de una u otra manera, la situación de la alimentación en nuestra población. No hay que olvidarse que la indigencia se mide por la canasta básica de alimentos y eso va en aumento. Hay un rol de las organizaciones, hay un consenso en los distintos actores políticos que es un tema importante para discutir. El tema es el como, en eso pareciera que a algunos les sirve que haya pobreza y les sirve que esto tenga continuidad. Son los sectores que se enriquecen.

-Mencionaba a la ministra de Desarrollo Social de Nación, Carolina Stanley ¿Qué opinión tiene acerca de su rol?

-El rol de Carolina Stanley es la contra cara del proyecto de Macri. No es que ella es la buena y el es el malo. Son las dos caras de una misma moneda, en la cual su política es muy inteligente en entregar recursos a determinadas organizaciones. Y tener siempre como una variable a un interlocutor privilegiado como lo fue Grabois, que de hecho hablo muy de bien de Stanley y Stanley de Grabois.

-¿Ve una contradicción en ese vinculo?

-Parece incompresible, porque Grabois fue el primero que salió a bancar a Cristina, cuando muchos no la bancaban. Son contradiciones que nosotros creemos que no son tales. Porque siempre fue importante para (Mauricio) Macri tener a Cristina de enemiga y a Cristina, a Macri de enemigo para subsistir. Son enemigos necesarios entre si. Creo que alguna explicación hay desde la política y como ellos pensaban manejar la situación hacia adelante. De todas maneras, somos organizaciones hermanas. Desde el punto que vista que todas tenemos un trabajo territorial y sabemos lo que pasa en el territorio, mas allá de las distintas formas que tengamos y los posicionamientos.

-Muchas de las organizaciones sociales forman parte del Frente de Todos ¿Será posible la articulación entre las distintas fuerzas?

-Yo siempre recalco que cuando comenzamos a marchar con el Movimiento Evita, la CTEP y la CCC cada uno estába con distintos posicionamientos en la política electoral. Unos con De Gennaro, otros con Massa y otros con Randazzo y sin embargo teníamos inteligencia común para movilizarnos en la calle. Ahora nos pasa lo mismo con el Polo Obrero y el resto de las organizaciones. Nosotros decimos que la mejor alternativa es Lavagna, ellos dicen que el FIT es lo mejor que podría pasarnos. Después hay un montón de grupos, que dicen «votamos luchar», que tienen una posición anti electoral, y sin embargo podemos confluir en la calle. Mas allá de las visiones, nos reconocemos en el territorio. Estamos dando una batalla y dando una respuesta donde el Estado no llega.

-Si se confirma el triunfo de Alberto Fernández el 27 de octubre ¿formarían parte de su eventual gobierno?

-Sea quien sea el gobierno que siga lo vamos a evaluar por sus acciones y por sus hechos. Después dependerá de como sea la convocatoria y el perfil que tome. La experiencia nuestra con el kirchnerismo fue de una desconfianza terrible, incluso por la historia que traía desde Santa Cruz, pero nosotros fuimos evaluando los posicionamientos y algunos hechos.

-Fuiste directora de Educación Popular en el gobierno de Nestor Kirchner…

-Nestor Kirchner nos convocó en su momento y nosotros no llamamos a votar por él. Lo comparábamos con Menem (Risas). Néstor venia de la mano de Duhalde… Nosotros evaluamos algunas cuestiones que tenían que ver con nuestras reivindicaciones. Por eso hizo un llamado a construir la transversalidad y a integrar a las organizaciones a la gestión del Estado. La verdad fue muy importante porque pudimos extender nacionalmente una serie de iniciativas que habíamos construido en la organizaciones, pero con ese limite. Cuando es política de Estado transciende un poco más.

-¿Cuál siente que fue el «limite» que se atravesó?

-Tocó el limite político. Porque Nestor Kirchner después de ganar las elecciones con las organizaciones sociales contra Eduardo Duhalde, que jugaba con toda la estructura del PJ… Esa experiencia fue muy interesante pero Kirchner no la profundizó. Una vez que hizo esa experiencia, planteó presidir el PJ. Eso para nosotros toco un limite, porque para nosotros era importante la transversalidad y generar nuevos espacios políticos. Y no vinculadas a las estructuras tradicionales. Los que eramos funcionarios renunciamos, yo volví al patio de las escuelas a dar clases.

 

-En 2018 un sector de Barrios de Pie se alejó de la organización ¿Cuál es la opinión que le merece la decisión?

-La ruptura que hicieron, la hicieron en base a una mentira: de que no se iban con Cristina y un fin de semana vimos una bandera de Menendez en la presentación del libro «Sinceramente», en La Matanza. La verdad, es una organización que nace de la mentira. Les pesó tener que dar explicaciones a una organización colectiva. Se creyeron que porque eran figuras visibles y tenían determinado protagonismo, que lo habían conseguido ellos mismos. Si ellos consiguieron ser las figuras publicas que son hoy, es producto de todo nuestro esfuerzo y sacrificio. Acá el que se la cree porque es el mas lindo, el mas bueno, el que mejor habla, esta en el horno. Son caminos que se eligen… por eso nosotros también le decimos que dejen de usar nuestro nombre, porque este nombre tienen mucha historia, mucho trabajo y mucho sacrificio. Tiene un conjunto de compañeros en la provincia que no empezaron ayer. Empezaron hace muchos años.

-En lo electoral apoyan la candidatura de Roberto Lavagna ¿Cómo es la recepción en la campaña?

-Hay buena recepción en las propuestas. Lavagna es un candidato que tiene mucha aceptación desde el punto de vista que tiene una experiencia en el gobierno de Nestor que es valorada. Pero esta jugando mucho el tema de la polarización. Creo que es interesante el debate de que hacen falta otras opciones. Un debate que es necesario y que de alguna manera ha tomado Cristina en ponerlo a Alberto en ese rol y ella correrse a un segundo plano en la campaña. Eso los ha hecho hacer esa jugada audaz desde el kirchnerismo, viendo que había un espacio para que no exista una confrontación entre ella y Macri.

-¿En San Martín como analizan la gestión del intendente Gabriel Katopodis?

-Con la gestión municipal tenemos varias discusiones. Creemos que ha habido un cambio importante respecto a la gestión de Ricardo Ivoskus, que en su gobierno desde la Avenida Marquez para este lado-Suárez- no lo tenia en su mapa. Las organizaciones armábamos los mapas porque el municipio no lo tenia. Me acuerdo que Daniel Ivoskus publicó un libro que se llamaba «Lo que no se dice no es» y yo decía: «¡que caradura!.. Una negación total». En eso Katopodis tuvo una impronta diferente. Pero con limites en algunas cuestiones. Creo que en algunas cosas si debería mejorarse la gestión.

-¿Tienen ámbitos de participación?

-Participamos de distintas instancias a las cuales nos convoca el Municipio. Aunque hemos sido relegados respecto a otras organizaciones en un montón de cosas. Nosotros estamos hace muchos años acá-en barrio Libertador- y se inunda, se llena de agua y no tenemos cloacas. Somos la primera escuela publica del barrio, y es una pelea histórica del barrio de que haya una escuela primaria.

La militancia y la pelea por el Aborto Seguro, Legal y Gratuito

«¿Y ahora que hago?», fue la pregunta que se realizó Saravia al terminar el secundario. En aquellos años de adolescente, la líder de Barrios de Pie había participado del Centro de Estudiantes de su escuela y era delegada de su curso. A partir de allí se largaba en su camino como una militante popular vinculada al trabajo territorial.

«Cuando termine el secundario estaba de novia con un pibe y fuimos a un acto de la izquierda unida, que en aquel momento movilizaba de una manera impresionante pero había ahí algo que no nos cerraba. Entonces, vimos un grupo chiquito con la bandera celeste y blanca. Nos acercamos y era Patria Libre. A mi me tiraba la celeste y blanca, no me cabía lo rojo», cuenta entre risas.

Durante la década del 90 su labor territorial en el barrio de Billinghurst la llevó a vincularse con el periodismo de rock: «En la Radio Nueva Generación teníamos un programa que se llamaba «Juventud divino tesoro» con la cortina de Luca Prodan. Lo que hacíamos era ir a ver las bandas del barrio y hacerles entrevistas y después pasarlas al aire. Hacíamos ese programa con cuatro jóvenes del barrio y andábamos con eso y actividades solidarias», agrega.

A mitad de los ’90 la situación social comenzaba a recrudecerse y repercutía en las distintas barriadas. «Se vinieron los tiempos mas difíciles y empezamos con un comedor: «Las hormiguitas viajeras», nos pusimos ese nombre porque andábamos de un lado para el otro. Empezamos en un club y nos echaron, después fuimos a la casa de una compañera y si el día estaba lindo lo hacíamos en una plaza. Cuando nosotros cumplimos un año se hizo la toma de los terrenos de 8 de Mayo y pudimos comprar un terreno entre tres compañeras».

–¿Cuál es su posición sobre la legalización del aborto?

-Mi posición es que el aborto tiene que ser legal. Con las compañeras tenemos un posicionamiento colectivo, que a algún sector del feminismo le resulta chocante, pero es que nosotras estamos en contra del aborto pero queremos que sea legal. Nosotras defendemos la vida. Una compañera que toma la decisión de hacerse un aborto no es una decisión liviana, fácil y sencilla. Muchas veces son decisiones muy difíciles que nos meten en muchas contradiciones. Las compañeras damos de comer, acompañamos en los embarazos y en las situaciones de violencia, para tener una vida más feliz y con mayor dignidad. La mayoría de nosotras somos mamas, yo tengo un hijo y una hija. Cuando una mujer toma esa decisión hay que respetarla y acompañarla. Lo peor que se puede hacer es juzgarla, aislarla y agredirla. Es su cuerpo, es su vida y la vida de los hijos. El acompañamiento no tiene que ser solamente de una compañera, tiene que ser del Estado. En las salitas tiene que haber un medico que la pueda escuchar y acompañar. El aborto tiene que ser legal, seguro y gratuito.

-Hay una lógica que se está empezando a romper, pero que aun prevalece, que es que los hombres ocupan mayores posiciones de poder en la política ¿Cómo atraviesa liderar una organización social y política?

-Es un momento en que esa lógica se está rompiendo. Sigue habiendo sectores que de una forma u otra te hacen sentir esa situación. Me pasa con algunos medios, que buscan a algunos voceros varones antes que a las mujeres. Pasa con los dirigentes, que priorizan hablar con varones y no con las mujeres; pasa con los funcionarios, que desvalorizan hablar con las mujeres. Yo formo parte de una organización que siempre, desde que empece, me hizo reflexionar sobre el tema, aun cuando yo ni me lo replanteaba.

Lucas Centurión

Fotos: Franco Ponce

Publicado en: zorzaldiario.com.ar


Por Silvia Saravia / Nacional octubre 11, 2019 14:04