No hay peor sordo que el que no quiere oir

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Humberto Tumini, secretario General de Libres del Sur y miembro de la Mesa Nacional del FAP, sobre las manifestaciones de ayer y el gobierno nacional

No hay peor sordo que el que no quiere oír

Miles y miles de ciudadanos se movilizaron ayer en la ciudad de Buenos Aires y en múltiples lugares del interior del país con críticas al gobierno nacional y a la Presidenta. Estas fueron las respuestas de los habituales voceros del oficialismo: “Al Gobierno no le preocupa el cacerolazo, a esa gente que marchó le importa lo que pasa en Miami y no aquí", dijo el Jefe de Gabinete Abal Medina. “No se cuáles son los planteos que hicieron los manifestantes”, contestó a los medios de prensa hoy el senador Aníbal Fernández.

Pocas dudas caben de que la sordera del gobierno persiste. También la arrogancia de argumentar que los que se movilizaban no eran votantes suyos, por lo que nada había que considerar.

Sin embargo, el mensaje que los manifestantes dejaron ayer fue muy claro, más allá de la natural heterogeneidad de acciones así de masivas: no están de acuerdo con la soberbia, el autoritarismo, la falta de respuestas a cuestiones angustiantes como la inseguridad y la inflación, con la corrupción y con la agresividad kirchnerista. Menos aun con la re-reelección de Cristina. Sólo el que se tapa los oídos y los ojos pudo no verlo.

Bien haría el gobierno, y en especial la Presidenta, en tenerlo en cuenta. Solamente malos augurios para la Nación sería que -como autistas-, nada cambien y sigan despreciando la opinión ajena y la crítica. 

Humberto Tumini
Movimiento Libres del Sur–Frente Amplio Progresista