[Corrientes] Boleto: tarifazos contra los que menos tienen
El servicio sigue siendo deficiente y los usuarios denuncian la baja frecuencia, falta de rampas para discapacitados y refugios. Sin embargo, se habla nuevamente de un tarifazo. “Lo que vuelve a suceder es que son lxs usuarios quienes deben soportar nuevamente la falta de rentabilidad de una empresa monopólica que se excusa de no poder aguantar los aumentos en salario, que ya se cerraron y son tan importantes para los trabajadores”, señaló Silvana Lagraña, referente de Libres del Sur.
AUMENTO DE TARIFAS
En los últimos años los aumentos del boleto se hicieron más frecuentes y el servicio en algunas líneas continúa siendo deficiente.
En febrero de este año los concejales aprobaron un aumento anual del boleto del 42% que se establecería en dos tramos. Es así que en marzo pasado la tarifa plana del boleto pasó de $7,68 a $9,50 y desde el 10 de este mes pasará a costar $11.
Como todos los años los empresarios aluden a que deben incrementar el valor de la tarifa plana para poder mejorar el servicio de transporte en la ciudad. Sin embargo las quejas siguen siendo las mismas que hace años atrás, baja frecuencia que generan demoras de hasta 40 y 50 minutos de espera, carencia de colectivos adaptados para discapacitados, falta de rampas en las paradas de colectivos, sin contar las interminables denuncias por falta de refugios.
En el caso de los refugios las empresas aludieron ya en el 2016 antes de que el boleto se fuera a $7,30 que iban a instalar en un plazo no mayor a los 180 días unos 100 refugios en diversas zonas de la ciudad. Sin embargo hasta la semana pasada funcionarios del municipio aseguraron que todavía se estaban instalando esos refugios.
La carencia en este sentido es mucho más evidente en los barrios periféricos y los usuarios siguen reclamando mejoras en el servicio.
Los aumentos se siguen aplicando e incluso este año tras haber cerrado un incremento del 42%, los empresarios del servicio de transporte amenazaron con no pagar las paritarias establecidas pero finalmente ayer lunes llegaron a un acuerdo y se levantó el paro de transporte que se tenía previsto para mañana.
Los empresarios exigían que el aumento del boleto a aplicarse el 10 de mayo ($11) quede sin efecto y abran un nuevo diálogo entre la Cámara Empresaria del Transporte Urbano (CETUC) y el Sistema Integrado de Movilidad Urbana (Simu). Este último tiene injerencia directa sobre el transporte urbano de pasajeros, licitación y sobre todo el valor de la tarifa del boleto.
En el 2016 se aplicaron dos aumentos de $5,25 a $7,30 con la tarjeta SUBE y en los meses posteriores de $7,30 a $7,68 también con el mismo sistema de pago. Finalmente, este año el boleto aumentó en marzo pasando de $7,68 a $9,50 y el 10 de mayo pasará de $9,50 a $11.
Desde Libres del Sur se exige que haya un organismo de contralor que pueda establecer un control de los pliegos que se presentaron cuando solicitaron un aumento y que desde hace años no se cumplen.
Es que los problemas persisten y el boleto sigue afectando al bolsillo del que menos tienen y deben viajar varias veces al día para ir a realizar actividades laborales. Un usuario que debe viajar en colectivo dos veces al día tendrá desde el 10 de mayo (tarifa plana de $11) un gasto diario de $44, que por semana (de lunes a viernes) significará un gasto en colectivo de $220. Esto al mes tendrá un equivalente a $880.
TARIFAZOS CONTRA LOS QUE MENOS TIENEN
“En definitiva, el lado más vulnerable vuelve a soportar "las pérdidas" de la empresa que sigue creciendo y acumulando grandes ganancias. Poco se sabe de lo que acumulan anualmente como empresa prestadora de unos de lis servicios más utilizados en nuestra provincia. Pero sí conocemos las deficiencias ya casi históricas que no cumplen respecto a mejorar la calidad del servicio”, dijo Lagraña.
Por otra parte, apuntó que resulta desacertado que sean presionados lxs trabajadores para lograr lo que le corresponde por derecho: incrementos en su salario. “Teniendo en cuenta como todos los días hacemos frente al sostenido crecimiento en precios de bienes y servicios”, aseveró.
Y en el mismo sentido, consideró “un error” que los usuarios ante las mismas exigencias de soportar la suba de precios en la canasta básica, deban ahora soportar un nuevo incremento en la tarifa del transporte”.
De igual modo, sostuvo que esto no es un hecho aislado, sino que está fuertemente relacionado con el funcionamiento más general de la economía y las medidas de ajuste que se vienen implantando a nivel macro, “donde no existe una relación justa entre los incrementos de los salarios de los trabajadores y los incrementos sostenidos que se vienen dando y todo indica que va a continuar”. Por lo tanto, frente a estas injustas situaciones, opinó que “es el Estado quien debe garantizar y promover medidas de acción que cuide los intereses comunes de la ciudadanía”.