En año y medio: 1.145 nuevas denuncias

 

Por: Florencia Rodriguez

Los casos de femicidio –asesinatos de mujeres– siguen multiplicándose en todo el territorio nacional. Tras conocerse los hechos ocurridos en los últimos días, como el del cuádruple crimen en La Plata –donde cuatro mujeres fueron asesinadas a puñaladas–, el femicidio de Carla Figueroa, en General Pico, La Pampa –muerta a manos de su esposo y violador, o el de la mujer en Maipú asesinada tras una discusión con su marido, el sábado por la tarde (ver página 17); el país continúa estremeciéndose ante la ferocidad de los hechos.

Mendoza no permanece ajena a esta realidad pues, en tan sólo un año y medio son alrededor de 1.145 las mujeres que denunciaron, por primera vez, que han sido víctimas de comportamientos violentos.

"En casos de violencia de género o femicidio, la mayoría de las veces, las personas que maltratan mujeres tienen vínculos afectivos con ellas. Son esposos, ex esposos, amantes o ex amantes", señaló Karina Ferraris, especialista en la temática y ex candidata a la Vicegobernación de la Provincia por el Frente Amplio Progresista (FAP).

Según datos brindados por el Ministerio de Desarrollo Humano, Familia y Comunidad de la Provincia, 97 por ciento de las consultas por violencia de género son realizadas por mujeres. Y en 39 por ciento de los casos, los agresores son esposos, 21 por ciento son ex parejas y 20 por ciento, parejas. Hay que tener en cuenta que los datos registrados son casos de mujeres que se animan a denunciar.

"Mendoza está muy atrás con respecto a este tema. No respeta la Ley Nacional N° 26.485 (de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer) porque no hay presupuesto asignado y destinado a la aplicación de esta ley. El Estado debe estar presente para garantizarle a la mujer apoyo económico y un refugio para que no sufra los desquites de su pareja al momento de regresar a casa", sentenció Ferraris.

Y agregó: "También falla en la Ley de Educación Sexual. Aquí no se implementa el manual elaborado por la Nación, sino que se dispusieron a armar uno propio con sectores religiosos y retirar importantes mitos de la adolescencia, como el que señala que la mujer no puede quedar embarazada en su primera relación. La educación sexual es clave, es una herramienta fundamental para la prevención y para la promoción de relaciones sanas entre varones y mujeres", completó la ex delegada del Inadi en la provincia.

CIFRAS EN ASCENSO. Entre el 2010 y el primer semestre del 2011, las estadísticas señalan que el tipo de maltrato más utilizado para violentar a una mujer es el psicológico, ámbito en el que se registraron 1.053 casos. Luego se anota la violencia física, que suma 810 denuncias; posteriormente está el económico con 577 casos y, finalmente, el sexual con 206. En todos los casos hay una gran porción de denuncias reiteradas.

María Inés Capmany, psicóloga a cargo de las capacitaciones que brinda el Programa Provincial Vivir sin Violencia, opinó que estos datos "no significan que hayan aumentado los casos de violencia de género, sino que, ahora, la mujer tiene un lugar al que acudir en busca de ayuda".

La profesional sostuvo que cuando las mujeres van a la comisaría y no son atendidas se debe a que "existe mucha resistencia para entender esta problemática. Es una negación de lo que sucede, pero se debe a una necesidad de entender el abuso, algo que es incomprensible y se refugian en pensamientos machistas como 'algo habrá hecho'. Por eso se capacita a cadetes a punto de graduarse para sensibilizarlos y prepararlos para enfrentar estos temas".

En esa línea, la psicóloga indicó: "Haciendo un mea culpa, hay que reforzar las políticas, dar a conocer a la población los sitios en los que se puede pedir ayuda, fortalecer los equipos destinados a trabajar en esta problemática y generar más campañas y difusión", concluyó Capmany.