Sapag: Basta de peaje
Sapag: Basta de peaje
La estafa que constituyó la concesión de las áreas petroleras y la entrega de alrededor de 9000 km de rutas argentinas a manos privadas durante el menemismo y que fue sostenida por De la Rúa, Duhalde, Néstor Kirchner y hoy por Cristina Fernández ha dejado lamentables consecuencias en nuestro Pueblo.
El caso de la concesión de la ruta 7 es emblemático. En el año 1994, el entonces gobernador Jorge Sobisch, en clara sintonía con las políticas neoliberales instrumentadas nacionalmente por Menem, firmó con ODISA – VIALCO (UTE que conformó la empresa Caminos del Comahue S.A.) el contrato de concesión de obra pública para la construcción de la multitrocha de vinculación Parque Industrial Neuquén-Centenario y el puente sobre el Río Neuquén interconexión Centenario-Cinco Saltos (aproximadamente 10 km de ruta) para lo cual el FONDEP (actual IADEP) le otorgó un préstamo de U$S 15 millones. La empresa debía devolver esos dineros con los frutos del peaje que comenzó a cobrar apenas asumió la concesión. Por supuesto, y como ocurrió con todos los créditos otorgados por el sobischismo a sus amigos, tal préstamo nunca fue devuelto y la Provincia de Neuquén tuvo que recurrir a la Justicia para reclamar su devolución.
En marzo de este año expiraba el plazo de esta concesión, vale decir, que se terminaba el peaje sobre la ruta 7. Sin embargo, el actual gobernador, el del “cambio positivo”, Jorge Sapag, al igual que hizo con la renegociación de los contratos petroleros, en Junio del 2010 aprobó por decreto el traspaso directo de la concesión (con una prórroga automática hasta el 2025) a EMCOPAT, empresa fantasma que creó otra empresa fantasma –Corredores Viales del Neuquén- para continuar la explotación del peaje.
Toda una serie de irregularidades se han sucedido desde ese momento: la empresa tenía un capital inicial casi nulo para comenzar a operar, por lo que la Provincia debía gestionar ante Fiduciaria Neuquina la suma de $ 2.699.000 para la empresa (no se especifica si este monto es en concepto de crédito o de subsidio a la empresa, ni establece devolución de ese dinero); se autorizaba a la empresa a producir un tarifazo a partir del 01/01/2011 de entre el 300 y el 500% con el argumento de devolver la deuda que mantenía Caminos del Comahue con el IADEP (deuda que asciende a alrededor de $ 50 millones y que por decreto fue reducida a $ 23 millones); tanto la Provincia de Neuquén como Caminos del Comahue se obligaban a desistir de sus controversias judiciales algo que, ya sabemos no ocurrió; la empresa comenzó a operar el 1° de Julio del 2010 y a partir de esa fecha a cobrar los $ 0,50 de peaje sin haber realizado en estos 7 meses ninguna obra de inversión de las previstas en el acuerdo de cesión, como tampoco devolución alguna del préstamo y, para colmo de males, ahora ni siquiera abona en término el salario sus trabajador@s.
¿Qué espera entonces Sapag para dar por terminada la concesión? Con título de abogado, ¿no sabe el gobernador que el incumplimiento de las obligaciones centrales de la concesión por parte de la empresa da lugar a la rescisión del contrato? ¿Qué alternativa superadora está buscando? Miles de vecinos y vecinas de nuestra provincia han reclamado largamente que se termine con esta estafa. Ya se ha logrado suspender el aumento tarifario que habría significado un robo a l@s usuarios de la ruta 7. L@s trabajador@s del peaje deben tener garantías laborales. El Estado Provincial, responsable de esta situación, tiene la obligación de sostener estas fuentes de trabajo en lugar de seguir extorsionando a la opinión pública con falaces argumentos de despidos y desocupación.
Paula Sánchez
Diputada provincial
Movimiento Proyecto Sur
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